Femvertising: Mujeres que dan voz a otras mujeres en la publicidad

Se busca la erradicación de la cosificación femenina, los estereotipos y la violencia de género por medio de la fuerte influencia que ejerce la comunicación masiva. En la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, te contamos qué es el femvertising y por qué todas las marcas deben de sumarse a este inminente cambio.

En el pasado, las mujeres han jugado un papel primordial dentro de la publicidad, aunque en un gran número de ocasiones han sido blanco de degradación por medio de mensajes sexistas que reproducen una y otra vez estereotipos de género. Es decir, se utilizaba a la mujer como un recurso visual para atraer la atención de los consumidores, o bien, se mostraba a las mujeres realizando siempre las mismas tareas o comportamientos, como cocinar o lavar. Esto evidencia y reafirma la desigualdad y la violencia de género.

Además de las urgencia social por erradicar el panorama sexista y machista de las sociedad, el marketing tiene la necesidad de adaptarse a los nuevos tiempos, donde las personas consumidoras ya no compran sólo impulsadas por ofertas de letras grandes o por anuncios coloridos, ahora buscan una conectar con las marcas desde sus ideales. Así que las marcas alejadas de las preocupaciones sociales están lejos del marketing actual y del futuro.

Las sociedades han cambiado, el movimiento feminista ha avanzado mucho en los últimos años, por ello es natural que el marketing también cambie y se adapte al empoderamiento femenino. Además, es vital y una obligación moral que la comunicación masiva apoye a las mujeres que exigen sus derechos por medio de la difusión de sus mensajes y diversidad de realidades. La visibilización del empoderamiento debe ir más allá de los rostros citadinos.

El femvertisig es un movimiento de cambio ideológico dentro de la publicidad y el marketing, pero al mismo tiempo es una estrategia. Se define por cambiar los mensajes publicitarios respecto a las mujeres al eliminar estereotipos de género, cosificación o imposición de ideales de belleza para dar paso a la verdadera voz e imágenes de las mujeres.

Las empresas que pongan en marcha el femvertising como parte de su comunicación deben tener un compromiso real, tanto en sus procesos internos como externos. Pues no se trata de una estrategia que busque aparentar para conectar con el público femenino, sino de una postura en favor de la erradicación de la sexualización femenina y de la violencia de género.

Las marcas que se sumen al femvertising deben eliminar los mensajes o imágenes que denigren, violenten, cosifiquen a las mujeres o promuevan idealizaciones de belleza. Y de puertas para adentro deben ejercer la igualdad salarial y brindar las mismas oportunidades de crecimiento a todas las personas sin importar su género.

Este cambio, que marca un antes y un después dentro de la comunicación masiva, está impulsado por la presencia de las mujeres dentro de la industria. Ellas han llevado su voz y la de las mujeres reales a la publicidad y el marketing. Por ejemplo, en España, la Asociación de Empresas Consultoras en Relaciones Públicas y Comunicación afirma que más del 72% de los puestos en las agencias de publicidad y comunicación son ocupados por mujeres. En México aún no existen cifras al respecto, pero quienes estamos dentro de la industria de la comunicación presenciamos la mayoría de las mujeres. Además, en las universidades las carreras relacionadas con la comunicación predominan las alumnas.