Fake news, un serio y peligroso problema en tiempos de crisis

La información dejó de estar sólo en las manos de los tradicionales medios de comunicación porque nacieron muchas nuevas voces y opiniones, lo cual ha sido beneficioso para la libertad de expresión y la pluralidad. Son muchos los beneficios de que la información circule de manera libre y al instante, por ejemplo, podemos enterarnos de lo que sucede del otro lado del mundo en tiempo real, conocer diversas opiniones sobre un tema controversial y, de ese modo, formular una opinión informada y crítica. 

Sin embargo, el exceso de información que circula en internet y la libertad que existe para crear contenido, subirlo y difundirlo también trae grandes riesgos que van desde lo particular hasta lo general, es decir, desde poner en riesgo la vida e integridad de una persona hasta desestabilizar la seguridad sanitaria o política de todo un país. 

Y aunque la difusión de información falseada no es nada nuevo, pues desde las antiguas civilizaciones era un método usado para manipular la opinión pública, las redes sociales crean un panorama ideal para esta práctica. La facilidad con la que se puede crear contenido y difundirlo dificulta llegar a las personas que crean estas noticias. De modo que el ciclo de las fake news es difícil de definir y detener.

Cuando escuchamos fake new podemos remitirnos a casos muy sonados como las elecciones de 2016 en Estados Unidos, pero en realidad el asunto debe atenderse con mayor seriedad ahora que enfrentamos la crisis sanitaria por la Covid-19. El panorama económico, político y de salud actual exige que se tomen medidas serias con el fin de mejorar la detección de noticias falsas. Por ejemplo, una noticia falsa que tuvo auge durante los primeros meses de la pandemia fue la del dióxido de cloro como una cura para la Covid-19, lo cual no puede estar más lejos de la verdad, ya que puede ser letal para la salud. Esta desinformación resultó en un incremento considerable de ingresos a los hospitales a causa de intoxicación por dióxido de cloro, de los cuales algunos lamentablemente terminaron en decesos. 

Ante un problema de tal magnitud hay que reconocer nuestra posición de responsabilidad dentro de este ciclo de desinformación. Y aunque se requiere de medidas que sumen los esfuerzos de los medios, las redes sociales, autoridades gubernamentales y, por supuesto, los consumidores de información, también podemos implementar medidas inmediatas para cortar la cadena de desinformación. La clave es considerar las redes sociales como una herramienta útil, pero también como una responsabilidad que debemos asumir al momento de compartir información con nuestra red de contactos. Te compartimos algunos consejos para detectar fake news:

•    No te dejes llevar por el formato. Las noticias falsas pueden presentarse a modo de artículo, fotografía, vídeo, audio, etc. Así que, independientemente de la presentación de la información, siempre duda e investiga.

•    No te quedes con los encabezados, revisa la información hasta el final. Muchas veces el encabezado suele ser muy llamativo y conciso para que sea difundido al instante y así volverse viral. 

•    Usa el buscador de imágenes que ofrece Google, ahí podrás detectar todos los resultados en los que aparece dicha imagen y rastrear otros medios que hablan del mismo contenido para poder comparar la información. 

•    No pierdas de vista el medio de comunicación que comparte la noticia. Verifica que se trate de la página oficial de dicho medio, o bien, investiga acerca de éste para comprobar su seriedad.

•    La ortografía puede ser la clave.  Si detectas varias faltas ortográficas o de redacción, es probable que se trate de una noticia falsa.

•    Busca la misma noticia en otros medios y compara. Detente a buscar información sobre el mismo tema para poder ampliar tu visión y notar si existe alguna inconsistencia.

El sector del marketing tiene una posición relevante dentro de este tema porque se encarga de la creación y difusión de una gran cantidad del contenido que circula en redes, así que la responsabilidad que debe asumir es mayor a la de un usuario común. 

No verificar la veracidad de la información compartida por parte de una marca o empresa puede dañar seriamente su reputación, o bien, ser parte de una fake new puede afectar un negocio de forma definitiva. Por ello te compartimos consejos para implementar en tu quehacer publicitario:

•    Si dentro de tu estrategia de marketing se encuentra la curaduría de contenido, supervisa  que las fuentes sean confiables y sigue los tips que hemos expuesto anteriormente antes de compartirlo. Sobre todo, no te dejes llevar por lo atractivo de un título. 

•    Diseña protocolos para casos de crisis digital de acuerdo a la gravedad del problema. Puedes hacerlo en tres niveles de amenaza para poder afrontar cada caso de manera adecuada a la dimensión del problema. Así tendrás un plan a seguir de inmediato sin caer en el pánico que pueda agravar la situación. 

•    Si una fake new afecta tu marca, lo recomendable es actuar de inmediato con tu protocolo y desmentir la noticia por medio de diversos contenidos que sean concisos y argumentados.

•    Si la fake new acerca de tu marca o empresa se ha hecho viral, puedes aprovechar ese alcance para desmentir y darle la vuelta al efecto negativo, dejando una imagen transparente y confiable de tu negocio.

•    La mejor estrategia es la prevención. Realiza un constante monitoreo sobre lo que se dice de tu negocio en las redes sociales, de manera que puedas reaccionar de inmediato antes de que el problema alcance grandes dimensiones.

•    Por supuesto, no podemos dejar de recalcar que el uso de fake news como parte de una estrategia de marketing es un acto irresponsable y deshonesto, que daña el negocio que implementa este tipo de estrategia engañosa, a los profesionales que participan y a la audiencia. No hay nada como trabajar de acuerdo a la verdad y la transparencia.